
Nos llegó un Samsung Galaxy A12 para reparar.
Según el dueño, el problema era que no tenía retroiluminación y no mostraba imagen en la pantalla.
Sin embargo, al iluminar la pantalla con una linterna mientras el teléfono estaba encendido, la imagen sí se veía, lo que confirmaba que solo faltaba la retroiluminación.
1️⃣ Lo primero que revisamos fueron los conectores, ya que son el punto más débil de este modelo.
Pero al inspeccionarlos, todo parecía estar en orden.
2️⃣ Luego, examinamos los componentes responsables directos de la retroiluminación.
En este modelo, el circuito de retroiluminación está debajo de un escudo metálico, a la izquierda del procesador.
3️⃣ Cortamos con cuidado una pequeña sección del escudo y encontramos una bobina quemada y una marca de calor en el interior de la cubierta metálica, claras señales de sobrecalentamiento. 🙂
4️⃣ Reemplazamos el componente quemado por uno funcional.
En la mayoría de los casos, solo la bobina se daña, mientras que el CI (circuito integrado) sigue funcionando.
5️⃣ Lo más importante es solucionar la causa del fallo.
De lo contrario, al reconectar la pantalla y encender el dispositivo, la bobina nueva echará humo y se quemará otra vez. 😢
¿El culpable? Un cortocircuito en uno de los condensadores pareados en la parte trasera de la placa.
También cortamos un pequeño trozo del escudo para poder reemplazar los componentes defectuosos.
6️⃣ Sacamos componentes equivalentes de una placa donante y los instalamos.
☝️ Por cierto, la donante fue una Huawei Honor 10 Lite, ya que su circuito de retroiluminación es idéntico al del Samsung A12.
Volvimos a montar la placa en el dispositivo y la probamos: ¡todo funcionó!
Después del encendido, ajustamos el control de brillo y verificamos la pantalla al máximo brillo para asegurarnos de que no hubiera parpadeos o pérdida de luminosidad. 😉
Si tiene alguna pregunta, pregúntenos e intentaremos responder con el mayor detalle posible. Si este artículo fue útil para usted, califíquelo.