Esta historia, como todo lo que sucede en nuestro taller, comenzó con el hecho de que nos trajeron un reloj TAG Heuer Connected 2020 para su reparación. Una persona solicitó restaurar un cable de pantalla dañado en un reloj TAG Heuer. Pero lo más curioso en este caso fue la historia que provocó el mal funcionamiento, y no la reparación en sí.
Entonces, aproximadamente un mes antes, el propietario del dispositivo, por razones que desconocemos, se cayó y notó una leve delaminación en la pantalla y un pequeño espacio. Esperando un ensamblaje de alta calidad por parte del fabricante, no hizo nada y continuó usando este reloj.
En un día soleado, la pantalla con una carcasa de metal pesado saltó de su base y arrancó el cable al instante. Quién hubiera pensado que durante todo el tiempo transcurrido desde el daño, un suave pero fuerte viento del norte penetró debajo de la superficie de la pantalla, secando la base adhesiva.
Si prestas atención a la imagen, puedes ver que queda una fina tira de pegamento apenas perceptible.
Ciertamente, un caso interesante para nosotros y dramático para el dueño del reloj, me impulsó a escribir esta publicación. Pero, ¿qué podemos inferir de ello? TAG Heuer tiene el pegamento de mala calidad, no se caiga, vea un hueco, comuníquese con el taller... No sé... pero lo que sé con certeza es que incluso una pequeña grieta puede provocar reparaciones costosas.
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